Me pregunto si realmente sabemos formular bien los objetivos que nos marcamos, lo importante no es marcarnos muchos objetivos, sino que sean de calidad, para ello deben estar bien identificados.
Esta formulación nos sirve igual para marcarnos “objetivos personales”, como “profesionales”. Te animo que lo pruebes en tu desarrollo personal, para luego implementarlo en el laboral.
Cada vez se habla más de ello, pero seguro que no todo el mundo sabe que significan y el porqué hay que formularlos así, pero realmente esta es la clave “Identificar y formular claramente tu objetivo, puede llevarte a conseguirlo por muy difícil que te resulte”, seguramente no haya objetivos “malos” o “buenos”, pero sí una buena identificación de este.
El éxito o fracaso puedes estar en formular Objetivos SMART Plus (++): se trata del acrónimo inglés que nos indica el significado de cada una de las letras y las condiciones que debería cumplir nuestro objetivo cuando lo formulemos, para que sean considerados eficaces, efectivos y nos lleven a conseguirlo.
La “S” de Específico
Quiere decir que nuestro objetivo debe formularse con precisión, debemos “concretar” y determinar que queremos conseguir y no hacer declaraciones ambiguas, ni amplias, ni demasiado complicadas, un ejemplo de ambigüedad “quiero hacer más deporte este año” “Quiero estudiar más…”
La “M” de Medible
El objetivo debe poder “medirse” y / o “ser evaluado”, es decir que cuando lo formule tiene que haber algo que me dé la medida de que considero éxito, por ejemplo, “hacer deporte 4 días a la semana”, o “entregar el 95% de mis trabajos dentro de las fechas establecidas”.
La “A” – Alcanzable
El objetivo que nos marquemos debe ser realista y alcanzable para nosotros, no podemos ponernos un objetivo que está totalmente fuera de nuestro alcance, porque eso nos podría desmotivar y a la primera de cambio abandonarlo. Debe ser lo suficientemente ambicioso para que sea atractivo y nos motive, pero no llevarlo fuera de nuestro control, porque eso nos llevaría a frustrarnos y probablemente a abandonarlo a la primera de cambio, por ejemplo, “no puedo pensar hacer una mataron de aquí a 1 o 2 meses, si no me he preparado o no estoy habituado a correr.”
La “R” de Retador
Para pensar conseguir un Objetivo debemos tener “Ilusión” por conseguirlo, que sea atractivo para nosotros y que nos lleve a un punto de emoción, pero siempre que sea posible cumplirlo por nosotros, sin esa ilusión o reto, el fracaso puede sobrevenirnos, solo la ilusión nos puede hacer mantenerlo.
La “T” de tiempo
Es muy importante enmarcar nuestro objetivo dentro de un plazo de tiempo, debemos delimitarlo en el tiempo, si no lo hacemos corremos el riesgo de dejarlo abierto y nunca terminarlo, por ejemplo, “durante el primer trimestre del año, quiero dejar enviado mi CV a las 30 empresas del sector servicios.”
Si somos capaces de aplicar esta “fórmula” en nuestro objetivo, tenemos muchas garantías de conseguirlo, porque el minimizarlo nos va a permitir, tenerlo definido con precisión, poder seguirlo de forma exhaustiva, saber si lo estamos haciendo bien y si llegaremos al tiempo marcado para ello. Además de todo esto, podemos hacerlo mucho más estimulante con un PLUS a nuestro objetivo y es pensar en algo que realmente nos “Emocione y Estimule” y pensar en la “Recompensa” de conseguirlo.
Soy consciente que dicho así parece fácil establecer objetivos “SMART Plus +”, pero no lo es, necesitamos pensarlos, aterrizarlos incluso compartirlo con otras personas de nuestro entorno para saber si pasar el filtro SMART, solo así los haremos ambiciosos y retadores.
¿Te aparece probar a formular un objetivo SMART? Inténtalo y valora tú mismo si esta herramienta te es útil o no.
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