¿Es el puesto de técnico de gestión laboral un trabajo de responsabilidad?
La profesión de técnico de gestión laboral requiere presentar una serie de habilidades o competencias personales entre las que podemos destacar la organización, la autonomía en las funciones encomendadas y la capacidad resolutiva, pues continuamente nos enfrentamos a plazos que se han de cumplir, problemas que debemos resolver y realización de trámites con la administración que suponen el cumplimiento de obligaciones burocráticas, como el alta o baja de trabajadores, comunicación de certificados, contratos, cotizaciones, etc. Por ello, podemos afirmar que sí, la profesión de técnico de gestión laboral es una profesión de responsabilidad.
Pero, ¿qué significa esa responsabilidad?
Las tareas realizadas y las decisiones que tomamos en la interpretación y aplicación de la legislación laboral, cuya casuística es muy amplia, provoca principalmente tres tipos de errores que pueden tener consecuencias, estos son:
– Retrasos o presentaciones fuera de plazo
– Errores administrativos de mecanización de los datos
– Errores de interpretación de la legislación laboral
Y si he cometido alguno de estos errores, ¿qué consecuencias tendría?
Al igual que la casuística laboral, los posibles errores en su gestión son muy variados, pudiendo generarse situaciones que afectan a los propios trabajadores, manifestando su malestar o disconformidad por sí mismos, o mediante la representación de los trabajadores, por ejemplo, esto suele ocurrir cuando se comete un error en el cálculo de nóminas o se retrasa el cálculo de las mismas y por consiguiente, el pago. También podemos encontrar errores que detecta la administración, por sí misma o mediante alguna inspección laboral.
En cualquier caso, estaríamos ante posibles perjuicios económicos y sanciones que se pudieran imponer a la empresa, todo ello como consecuencia de nuestro trabajo.
En el Texto Refundido de la Ley General de la Seguridad Social encontramos, por ejemplo, los posibles recargos por presentación de cuotas de cotización fuera de plazo, que van desde el 10% hasta el 35% de la deuda.
También en la normativa sobre infracciones administrativas en el orden social se podrán conocer las acciones u omisiones que están tipificadas como faltas y sus posibles sanciones en materia laboral o de Seguridad Social.
Estas sanciones, se impondrán de forma gradual en base a la gravedad de la falta, ya sea leve, grave o muy grave, y también su grado mínimo, medio o máximo, llegando incluso a sanciones de hasta 187.515 euros.
¿Qué podría hacer para subsanar estos errores sin que sancionen a la empresa?
Como hemos podido comprobar, este puesto de trabajo es un puesto con responsabilidad, y se debe trabajar de forma organizada para evitar cometer este tipo de errores, por lo que una buena planificación es esencial.
No obstante, como humanos y dada la carga burocrática, la casuística laboral y la falta de organización de la normativa laboral, aquí tienes unos tips para intentar evitar y subsanar posibles errores:
–Cálculo de nóminas: el proceso de cálculo de nóminas, cuando trabajamos con un volumen elevado e incidencias masivas puede presentar dificultades o retrasos en la mecanización de todas las retribuciones, revisiones, etc.
De acuerdo con el Estatuto de los Trabajadores, la liquidación y pago de salario se hará de forma puntual y documentalmente en la fecha y lugar convenido. Como técnicos de gestión laboral debemos cumplir con dicho plazo pues de lo contrario se devengaría interés por mora del 10% de lo adeudado, y tanto el impago de salarios como el retraso de su abono de forma continuada podría suponer que el trabajador solicitara la extinción de la relación laboral debiendo la empresa indemnizar con el importe establecido para los despidos calificados como improcedentes.
–Presentación de cotizaciones: el importe recargo que se impondrá frente a los ingresos fuera de plazo dependerá de dos situaciones, la primera de ellas, si se ha cumplido con en plazo o no con las obligaciones de presentación de las cotizaciones, y la segunda dependerá del momento en que se liquiden.
Por tanto, lo recomendable será, cumplir con la obligación de presentación de las cotizaciones, aunque no se fueran a ingresar, y en segundo lugar ingresar cuanto antes las cuotas de cotización, así tanto el recargo como los intereses de demora serán los mínimos posibles.
–Altas y bajas de trabajadores: para realizar los actos de encuadramiento de altas y bajas de trabajadores se han de conocer los plazos establecidos, debiendo efectuarse el alta de forma previa al inicio de la relación laboral y la baja con un máximo de hasta 3 días naturales posteriores a la fecha de efectos de la baja.
Si no se efectuara el alta de un trabajador nos enfrentamos una infracción de tipo grave, pudiendo recaer una sanción de entre 626 y 6.250 euros. Si el alta o la baja se presentara fuera de plazo se exigirán las cotizaciones correspondientes hasta la fecha de efectos, incurriendo en unos costes innecesarios para la empresa, además de la posible sanción en su caso.
No obstante, tenemos la posibilidad de subsanar estos errores siempre y cuando sean detectados en plazo, así pues, podremos modificar o eliminar movimientos previos de altas o bajas; o bien, eliminar movimientos consolidados hasta 72 horas desde el día de consolidación del movimiento, ambos mediante Sistema RED. Si quisiéramos realizar una modificación de un movimiento consolidado se deberá realizar por escrito ante la Tesorería General de la Seguridad Social.
–Contratos de trabajo: los contratos de trabajo son el documento firmado entre trabajador y empresa mediante el que se acuerdan las características y condiciones de la relación laboral que se inicia.
Al realizar el contrato de trabajo podemos cometer varios tipos de errores: que el tipo de contrato no esté adaptado a la realidad del trabajo, pudiendo estar en un fraude en la contratación, y por tanto, que la relación laboral se entienda indefinida a tiempo completo; error en los datos de comunicados, ya sean datos personales, datos económicos, falta de cláusulas o cláusulas abusivas, error en la jornada laboral, no ajustándose a las condiciones que realmente se querían pactar; o datos referentes a la duración del contrato de trabajo, fijando una fecha superior a la máxima legal permitida. Estos errores deberán subsanarse en el contrato de trabajo y comunicarlo al Servicio Público de Empleo si ya se hubiera comunicado la contratación del mismo, usando el menú de corrección de datos de Contrat@ dentro del plazo de 90 días naturales siguientes.
–Presentación de partes de baja, confirmación o alta: cuando un trabajador se encuentra en situación de Incapacidad Temporal, debemos comunicar a la Seguridad Social los partes médicos de baja, confirmación y alta que el trabajador nos presente, pero es posible que se produzcan circunstancias o errores que requieran anular dicha comunicación.
Para realizar este trámite de anulación, el Sistema RED dispone de una opción de anulación de procesos de Incapacidad Temporal, que nos permitirá anular los partes enviados por error en un plazo de 30 días.
En conclusión, podemos afirmar que el puesto de trabajo de técnico de gestión laboral es un puesto de responsabilidad, el cual requiere de la formación y conocimientos adecuados para realizar sus funciones, pues la falta de estos conocimiento, podrá causar un grave perjuicio laboral y económico a la empresa. Además, la persona responsable de este tipo de gestiones deberá tener unas cualidades personales como capacidad organizativa, resolutiva y autonomía, que le permitirán evitar este tipo de errores o tener la capacidad de subsanarlos de forma eficaz.
Este post ha sido elaborado por Miguel Calvo, responsable del área de gestión laboral en Calvo López Asesores y docente en el departamento de RRHH en la EIP International Business School.
