El Big Data está, hoy en día, en boca de todo el mundo. En muchos casos puede llegar a sonar intimidante al tratarse básicamente de una gran recopilación de datos numéricos, detalles de la vida y características de las personas que, no obstante, si se utilizan correctamente pueden ser muy eficaces.
Esta tecnología, de hecho, puede ser un recurso muy útil para cualquier empresa u organización, especialmente si, bien gestionado, lo aplicamos a la perspectiva del marketing y la comunicación.
Como su propio nombre indica, Big Data hace referencia a un gran volumen de datos disponibles en la red, que pueden ser recogidos, almacenados y posteriormente procesados, que podrán generar información determinante para la toma de decisiones empresariales.
Pero, ¿cómo se utiliza el Big Data en el marketing?
El Big Data es la herramienta perfecta para conocer en profundidad a tu audiencia o público real y potencial. Esta tecnología significa dar un paso más a la hora de contactar con la audiencia, ayudando a que esta toma de contacto sea lo más cercana y personal posible.
El potencial a la hora de segmentar a los clientes es la clave en la relación entre Big Data y Marketing. Unos datos bien gestionados y un público dividido en función de diferentes características (edad, sexo, modo de vida, hábitos…) facilitará la función comunicativa y la hará muchísimo más eficiente, lo que beneficiará a toda la empresa u organización.
El Big Data permite generar un banco de datos único, segmentando los datos de forma precisa. Esto permite que los diferentes departamentos unan esfuerzos y compartan información, por lo que el trabajo será unificado y la logística más sencilla.
Gracias a estos datos podremos conocer cómo cambian y fluctúan las preferencias y decisiones de clientes, por lo que podremos adelantarnos a sus cambios y encontrar esos nichos potenciales sobre los que trabajar. También podremos adelantarnos a una posible perdida de clientes, llegando a ellos desde diferentes perspectivas y evolucionando según sus preferencias.
La actualización de datos en tiempo real es una de las claves del uso de Big Data. Ese continuo flujo de datos podrá influir en las decisiones de la empresa en tiempo prácticamente inmediato, lo que supondrá un gran avance o ventaja a la hora de lidiar con posibles crisis o fallos. Este flujo continuo influye también en la supervisión y vigilancia de los cambios en las tendencias del mercado, que podrán ser decisivos para el desarrollo empresarial.