Para llevar a cabo un programa de Compliance de calidad hay que tener en cuenta toda la normativa y legislación relacionada con el área de actividad de la organización.
En el sector hotelero, la tarea es más complicada que en otros sectores ya que no existe una ley estatal que regule la actividad turística, existiendo en su lugar numerosas leyes autonómicas que regulan este sector de diferente manera entre sí, por lo que nos encontramos con una normativa dispersa y compleja, lo que conlleva un gran reto para el Compliance y añade dificultad a estas organizaciones a la hora de establecer los procesos internos.
Así, los establecimientos hoteleros están sujetos a legislación sobre los edificios y legislación sobre el servicio; pero también deben cumplir con el resto de normativa que aplica a todos los sectores: normativa laboral, fiscal, consumo o protección de datos, entre otras.
Entre los riesgos penales que pueden producirse con mayor frecuencia o probabilidad dentro de las empresas hoteleras podemos encontrar falsificación de tarjetas, fraudes, estafas, delito fiscal o blanqueo de capitales. Por ello, la posible comisión de estos delitos debe contemplarse en el programa de Compliance, elaborando normas, procedimientos y medidas para evitarlos e implementando un mapa de riesgos penales que permita identificar aquellas actividades dentro de la empresa donde existen más posibilidades de que se cometa un delito. Para la realización de un mapa de riesgos se necesita tener un profundo conocimiento de la actividad que desarrolla la empresa. Es por ello que, en caso de contar con la figura de Compliance Officer, este debe estar continuamente en contacto con el personal de la organización para poder identificar estos puntos de riesgo.
De esta forma, para evitar sanciones, se hace preciso implantar procedimientos y medidas de cara a evitar conductas delictivas y, a la vez, fomentar e impulsar una cultura de cumplimiento dentro de la organización a través de la formación y sensibilización de la plantilla.
Implantar un programa Compliance dentro de una empresa del sector hotelero tiene numerosas ventajas. Y es que no solo se trata de poder llegar a evitar una condena por responsabilidad penal; sino que también implica importantes mejoras en la rentabilidad y la imagen de la empresa frente a posibles inversores y/o clientes.